EL MAR es blando a oscuras
y desde arriba
puedo sentir mis dedos lánguidos
hundirse en su blanca superficie de gel
sin llegar a alcanzar el frío.
El mar es blando y a oscuras
sostiene a la luna con su aliento
mientras se mancha de luz
sus senos preñados de lo profundo
de todos los ojos.
El mar es blando
y refleja la noche en sus entrañas
entrañas
entrañas
entrañas…
Pero al llegar la mañana
se escurre entre los dedos de mis pies
y cura las heridas que dejó
la bruma.